Inteligencias Múltiples, una propuesta para atender a la diversidad
Howard Gardner y su Teoría de las Inteligencias Múltiples pusieron de manifiesto la existencia de ocho formas posibles de ser inteligente. Este artículo de emtic, escrito por Milagros Rubio Pulido, hace un recorrido rápido por cada una de esas inteligencias y ofrece una colección de recursos, plantillas, experiencias y otros referentes que nos ayudarán a que nuestras programaciones didácticas sean más interdisciplinares y posibiliten la educación personalizada tan necesaria en las escuelas del siglo XXI.
Nuestra inteligencia es holística, integra el funcionamiento de diferentes redes neuronales interconectadas entre sí. Sin embargo, Howard Gardner y su Teoría de las Inteligencias Múltiples ponen de manifiesto la existencia de ocho formas posibles de ser inteligente. Se trata de entender la inteligencia más allá de la acepción puramente academicista a la que está ligada en el ámbito educativo, de aceptar que podemos ser polifacéticos a la hora de expresar nuestras capacidades, talentos, aptitudes, habilidades…
Esta mirada de la inteligencia encaja perfectamente en un modelo de escuela inclusiva que quiere, y debe, responder a la diversidad de todo el alumnado, una diversidad que es signo de identidad de cualquier centro educativo. La Teoría de Gardner permite la educación personalizada que tanto ansiamos en una escuela del siglo XXI y que, por otro lado, es una necesidad imperiosa. Te mostramos cómo hacerla posible.
- Todas para una y una para todas
- Multiplícate por ocho
- Las Inteligencias Múltiples en el aula
- Recursos y referencias
- Educar para la vida
1. Todas para una y una para todas
Sabemos que la Teoría de Gardner ha recibido diferentes críticas en contra, como el origen genético de las inteligencias, el valor equitativo otorgado a todas ellas, la definición excesivamente genérica y sin la suficiente base empírica, etc. Aún así, este profesor fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias en 2011. ¿Por qué? Porque su teoría es útil para entender que existen diferentes formas de mostrar que somos talentosos (a través del lenguaje, de las matemáticas, de la música, del dibujo, de la expresión corporal, de la orientación espacial, de las relaciones sociales… o combinando varios talentos) y que cada persona muestra de manera preferente unas habilidades con respecto a otras. Si Gardner hubiera hablado de “habilidades preferentes” y no de “inteligencias múltiples”, su teoría no hubiera tenido el mismo impacto.
Nuestra inteligencia está constituida por todas esas habilidades y su potencial de desarrollo mediatizado, en gran parte, por lasexperiencias que emergen en cada contexto. Entre esas experiencias, nos interesan las que ofrecemos en los contextos educativos. ¿Para qué? Para aprender como docentes a enriquecer nuestras prácticas, para dar respuesta a la pluralidad de aprendices de nuestras aulas, para avanzar un poco más en la educación personalizada, teniendo en cuenta el cerebro del que aprende y no solo del que enseña.
En su preámbulo, la conocida LOMCE (ESPAÑA) recoge: Todos los estudiantes poseen talento, pero la naturaleza de este talento difiere entre ellos. En consecuencia, el sistema educativo debe contar con los mecanismos necesarios para reconocerlo y potenciarlo. (…). Esto es: la escuela debe garantizar que cada alumno desarrolle su potencial.
Ocho son las inteligencias que conforman el prototipo más mediático de la Teoría de Gardner, pues en la evolución de sus estudios también han existido otras, como la inteligencia existencial, por ejemplo.
Vamos a centrarnos en las formas que tenemos para ser capaces, sabiendo que esas capacidades pueden estar interrelacionadas. Todo ello dependerá de experiencias previas, intereses, refuerzos recibidos, modelos a los que imitamos e incluso del estilo de vida que tenemos. La siguiente tabla conceptualiza cada una de las inteligencias múltiples (IIMM) y algunos facilitadores de aprendizaje para desarrollarlas.
Inteligencia lingüístico-verbal: capacidad para manejar el lenguaje oral y escrito, para expresarse a través de las palabras e interpretarlas. Facilitadores: escritura creativa, poesía, lenguaje cómico, presentaciones orales, contar y escuchar historias, juegos de palabras, descripciones, debates, lectura comprensiva, artículos, etc. |
Inteligencia lógico-matemática: capacidad para resolver problemas de lógica y razonar ante ellos, para manejarse con el cálculo y los números. Facilitadores: operaciones de cálculo, desciframiento de códigos, fórmulas, enigmas matemáticos, juegos de lógica, secuencias numéricas, silogismos, análisis estadístico, categorizaciones, relaciones abstractas, etc. |
Inteligencia naturalista: capacidad para entender y relacionarse con el entorno natural, para estar sensibilizado con él. Facilitadores: cuidado de plantas y animales, clasificación de especies, prácticas de conservación, reacciones del medio ambiente, trabajos de campo, patrones arquetípicos, salidas a la naturaleza, proyectos científicos, experimentos, etc. |
Inteligencia viso-espacial: capacidad para observar y comprender el mundo creando imágenes mentales a partir de la experiencia visual. Facilitadores: asociar imágenes a ideas, dibujar, hacer un collage o maqueta, organizadores gráficos, esculpir, pintar, leer mapas, trabajar con fotografía y vídeo, geometría, orientación espacial, etc. |
Inteligencia musical: capacidad para interpretar la música y expresarse a través de ella, de sus elementos (ritmo, melodía, armonía…) Facilitadores: sonidos ambientales e instrumentales, composición musical, actuaciones musicales, patrones rítmicos, percusión, estilos musicales, tonos vocales, cantar-tararear, tocar instrumentos musicales, etc. |
Inteligencia corporal-kinestésica: capacidad para manejar la expresión corporal, la comunicación mediante el movimiento y los gestos, incluyendo las habilidades físico-motoras. Facilitadores: lenguaje corporal, escultura corporal, mímica, dramatizaciones, rutinas gimnásticas, danza creativa, práctica de deportes, ejercicio físico, actividades manipulativas, etc. |
Inteligencia intrapersonal: capacidad para conocernos a nosotros mismos y para actuar conforme a nuestras posibilidades y limitaciones. Facilitadores: diario de aprendizaje, escala de valores, técnicas de metacognición, autoevaluación, habilidades de concentración y atención plena, proyectos individuales, métodos de reflexión silenciosa, actividades de relajación, etc. |
Inteligencia interpersonal: capacidad para relacionarse y empatizar con los demás, para actuar de manera asertiva. Facilitadores: habilidades sociales, aprendizaje cooperativo, tertulias dialógicas, comunidades de aprendizaje, proyectos de grupo, tutoría entre iguales, hermanamientos, coevaluación, grupos de ayuda y/o voluntariado, etc. |
3. Las Inteligencias Múltiples en el aula
Al igual que no debemos determinar la inteligencia de un alumno en base a sus conocimientos en las áreas instrumentales, tampoco debemos caer en el error de que cada persona destaca en un solo tipo de inteligencia. Se trata de tener una visión globalizada de todas ellas para brindar experiencias de aprendizaje más completas y plurales. La escuela es el mejor contexto para ello, y puede y debe hacerlo. Pero, ¿cómo?
1º) Conociendo el predominio en nuestros alumnos de sus IIMM, a partir de una evaluación inicial donde podemos emplear procedimientos menos o más estandarizados: observación directa y registro anecdótico, creación de un portafolio de talentos de cada alumno o de un perfil de inteligencias múltiples, aplicación de test y cuestionarios, etc. Ejemplos: test de H. Gardner, test de Psicoactiva, test de Ceca, Cuestionario de Autoevaluación de Inteligencias Múltiples (CAIM), test para Educación Secundaria, test de Conocimientosweb, cuestionario de Escuela con cerebro, registro de Marisol Justo de la Rosa, inventario de Javier Bahón, perfil para Educación Infantil de Orientación Andújar, etc.
2º) Adaptando las estrategias didácticas al grupo de alumnos y alumnas en función de sus potenciales talentos, el propósito de enseñanza, el contexto educativo, el momento,… teniendo presente que es necesario combinar teoría y práctica, pero ante todo que hay que empoderar al alumnado, es decir facilitar que tenga un papel activo en su aprendizaje. Así, nos aseguraremos de que nuestros estudiantes den sentido a lo que aprenden. Sobre metodologías activas, tenemos el artículo “¿Cueces o enriqueces? Metodologías activas al servicio del que aprende”.
3º) Planificando actividades, tareas o proyectos que combinen la puesta en escena de las diferentes IIMM, favoreciendo un currículo interdisciplinar. Facilitamos la siguiente información para ayudar en la planificación didáctica:
- Ocho maneras de aprender, ocho formas de enseñar, de Colectivo Cinética:
- Modelos de desempeño, de Miaceduca con ejemplos de actividades para cada inteligencia.
- Paleta de IIMM de Creapptividad, un organizador gráfico para programar a partir de las ocho inteligencias.
- Plantilla para la aplicación de las IIMM en el aula, de Nuria de Salvador.
- 186 actividades para desarrollar las IIMM, de Ortiz de Maschwitz.
- Ejemplos de productos de ABP (Aprendizaje Basado en Proyectos) para las IIMM, de Coral Elizondo.
- Matriz de paisaje de aprendizaje: una herramienta de programación en forma de tabla de doble entrada que combina las IIMM y los procesos cognitivos de la Taxonomía de Bloom. Las inteligemcias orientan el tipo de actividad y los verbos las estrategias cognitivas necesarias para realizarla (ejemplo 1, ejemplo 2). En este link de Escuelas Católicas tenemos amplia información sobre cómo sacar rendimiento a los paisajes de aprendizaje y la Comunidad de Madrid ha publicado en octubre de 2018 el documento “Paisajes de aprendizaje” con más ejemplos para todas las etapas. Haciendo clic en la imagen siguiente, podemos descargar la plantilla para editarla y así diseñar nuestra propia matriz.
4º) Remodelando los espacios educativos si fuera necesario, para que sean más abiertos y flexibles. Se trata de dar nuevos usos a los espacios de los que disponemos, tanto en el diseño macro como micro (rincones o zonas de aprendizaje, talleres, escenarios, centros de interés, etc.) El Ministerio de Educación tiene una versión en español de la publicación “Pautas para estudiar y adaptar los espacios de aprendizaje en centros educativos” (2018) con sugerencias para gestionar y organizar dichos espacios.
5º) Evaluando conscientemente, no solo el aprendizaje de los alumnos, sino también el modelo de enseñanza que ofrecemos. En el proceso de evaluación debemos procurar diferentes agentes evaluadores, diferentes momentos, diferentes contextos y diferentes procedimientos e instrumentos.
6º) Utilizando variedad de recursos, entre ellos los recursos TIC, combinando apropiadamente los materiales y herramientas que tenemos a nuestro alcance para educar. En el siguiente apartado os mostramos algunos ejemplos.
Insistimos en la idea de que NO hay que encasillar a cada alumno en un solo tipo de inteligencia; lo mismo ocurre con los recursos. Por su versatilidad, la mayoría de recursos pueden utilizarse para el desarrollo de varias IIMM. La clasificación siguiente es solo un punto de partida para que diseñes tu propia clasificación (pulsando en la imagen de “Recursos IIMM” accedemos a una plantilla editable). Más importante que disponer de todos estos recursos, es saber reutilizar los que tenemos, rentabilizarlos y sacarles el máximo provecho. Comencemos por los recursos-estrella:
- Las cartas de IIMM y los dados de IIMM, de Creapptividad (descargar en pdf)
- La caja de herramientas de IIMM, de David Lazear.
- La flor inteligente o la ruleta inteligente, plantillas del Proyecto CREA que te permitirán diseñar tu propio organizador gráfico de IIMM. Por ejemplo: de recursos, de actividades, de facilitadores, de TIC, etc.
En relación a cómo podemos clasificar las TIC para cada una de las IIMM, es archiconocida la siguiente infografía de Totemguard.
Si quieres saber más sobre IIMM y experiencias didácticas basadas en la Teoría de Gardner, te ofrecemos de postre un listado de enlaces que puedes consultar: “Saber más sobre IIMM”. Encontramos en la Red muchas referencias a las IIMM, inclusive el Ministerio de Educación dispone de un módulo formativo para el profesorado (módulo en pdf, módulo online).
La personalización del aprendizaje no es un fin, sino un medio para que las escuelas promuevan una educación para la vida, una educación que ayude a todos y cada uno de los alumnos y alumnas a ser competentes hoy, no solo en el futuro.
Para conseguir este propósito, tenemos que empezar a construir personas por cimientos sólidos; y esos cimientos son sus fortalezas, sus capacidades, sus destrezas, sus talentos, sus habilidades preferentes…, o como hemos citado en este artículo “sus inteligencias múltiples”. La escuela debe ser el lugar más idóneo para potenciar las ocho inteligencias, el lugar que proporcione un abanico amplio de experiencias para enseñar y aprender, el lugar donde los alumnos puedan dar sentido a su existencia.
Finalizamos invitando a la reflexión con una cita atribuida a Albert Einstein:
“Todo el mundo es un genio. Pero si juzgas a un pez por su habilidad para trepar árboles, vivirá toda su vida pensando que es un inútil”